El disco más emblemático de la historia del rock colombiano "El Dorado" lanzado en 1995, tuvo un súper homenaje a sus 28 años en el Palacio de los Deportes en Bogotá, donde fue interpretado casi en su totalidad. Un concierto merecido para los Aterciopelados, quienes a pesar de tantos altibajos, de la gratitud de muchos y a la vez la ingratitud y menosprecio de otros, se han mantenido firmes y andando por el tiempo donde ya serán inolvidables. Excelente show, grandes historias, mucha nostalgia, lágrimas, risas, invitados, y por supuesto grandes éxitos. Seguramente para los 30 o 35 años del disco, puedan ubicar el show en un recinto más grande, porque se lo merecen y creo que lo llenarían.

Otro de los mejores momentos de la noche, la participación de Carlos Vives para el tema más representativo, el samario quien a pesar de ser conocido por su música vallenata, no ha sido ajeno al rock y es muy cercano a Andrea y Héctor Vicente desde sus inicios.

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